El cardo mariano es una planta de la familia de las asteráceas y es nativa de regiones del Mediterráneo.
Se ha utilizado en la medicina tradicional durante mucho tiempo, y su componente activo, la silimarina, es la que le confiere sus propiedades medicinales.
Estas son sus principales funciones:
Protección Hepática: el uso más conocido del cardo mariano es su capacidad de proteger el hígado. La silimarina, un antioxidante presente en la planta, puede ayudar a prevenir daños hepáticos causados por toxinas, medicamentos, alcohol y otras sustancias nocivas.
Tratamiento de Enfermedades Hepáticas: el cardo mariano se utiliza en el tratamiento de diversas enfermedades hepáticas, como la cirrosis, la hepatitis y la esteatosis hepática no alcohólica (hígado graso no alcohólico). La silimarina puede reducir la inflamación y favorecer la regeneración de las células hepáticas.
Desintoxicación: este cardo se utiliza para desintoxicar el hígado y el organismo en general, contribuyendo a la eliminación de toxinas y sustancias perjudiciales.
Apoyo Digestivo: en algunos casos, se ha utilizado para aliviar problemas digestivos, como la indigestión, los gases y la distensión abdominal.
Reducción de Colesterol: algunos estudios sugieren que podría contribuir a reducir los niveles de colesterol en sangre.
Protección contra el Daño Celular: la silimarina actúa como un antioxidante que ayuda a proteger las células de todo el organismo contra el daño causado por los radicales libres.
Valoraciones
No hay valoraciones aún.