El gluconato sódico alimentario es la sal sódica del ácido glucónico, un compuesto de origen natural que se obtiene por fermentación de la glucosa.
Es totalmente biodegradable, inodoro e insípido, lo que lo hace ideal para múltiples aplicaciones sin afectar el sabor de los productos.
Conservación inteligente de alimentos procesados
Gracias a su acción estabilizante, el gluconato sódico se utiliza en:
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- Conservas, salsas y productos cárnicos.
- Lácteos procesados y bebidas funcionales.
- Alimentos preparados y listos para consumir.
Ayuda a prolongar la vida útil de los alimentos, impidiendo el deterioro causado por metales pesados o cambios de acidez, sin generar efectos adversos sobre el sabor, aroma ni color del producto final.
Control preciso del pH y reducción de sodio
En muchas fórmulas, el gluconato sódico se incorpora como agente tamponante, lo que permite:
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- Mantener niveles óptimos de acidez durante el almacenamiento.
- Evitar reacciones indeseadas entre ingredientes.
- Reemplazar parcialmente la sal común, reduciendo el sodio total.
Esto es especialmente útil en alimentos funcionales, productos dietéticos y fórmulas con requisitos nutricionales especiales, como baja en sodio o libres de conservantes artificiales.
Agente quelante natural: mejora la estabilidad y la textura
El gluconato sódico alimentario actúa como agente quelante, es decir, que atrapa iones metálicos como hierro o calcio, previniendo la oxidación y el deterioro de los alimentos. Esta acción mejora:
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- La textura en productos enlatados o precocidos.
- La claridad y estabilidad en bebidas.
- La protección contra el sabor metálico o de oxidación.
Esto lo convierte en un aliado clave en procesos industriales donde la pureza, la apariencia y el sabor son factores críticos.
