Calendula officinalis, comúnmente conocida como caléndula, es una planta con flores brillantes y de color amarillo o naranja que se ha utilizado tradicionalmente en la medicina herbal para tratar diversas dolencias.
Las flores de la caléndula contienen compuestos como flavonoides, carotenoides y ácido salicílico, que se cree que tienen propiedades antiinflamatorias, antioxidantes y cicatrizantes. Se ha utilizado tópicamente para tratar heridas, quemaduras, cortes, úlceras y otras afecciones de la piel, ya que puede ayudar a reducir la inflamación, promover la cicatrización de heridas y aliviar el dolor.
Además de sus beneficios para la piel, se ha investigado su potencial para tratar otros problemas de salud, como trastornos gastrointestinales, dolores menstruales y problemas hepáticos. También se ha estudiado su potencial para reducir la inflamación en el cuerpo y mejorar la función inmunológica.
Se puede encontrar en forma de aceite, tintura, extracto y crema para uso tópico, así como en forma de té o suplemento para uso interno.
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